Las auditorías en remoto no son la mejor opción a largo plazo

En el contexto de pandemia, se impone la necesidad de realizar auditorías online. A pesar de los aparentes beneficios, como ahorro en los costes de viaje, fácil contacto entre auditor y auditado o la oportunidad de una mejor preparación, las auditorías en remoto no son la mejor opción a largo plazo.
Esta es la principal conclusión de Ricard Castillejo y Urbici Cardona, profesores de IQS Executive Education y ponentes del webinar “Auditorías de Calidad online: ¿alternativa eficaz a las auditorías presenciales?” que ha analizado los pros y contras de las auditorías en remoto.
Las auditorías online no son una alternativa eficaz a las presenciales: “Eran una necesidad en el momento de contingencia del principio de la pandemia”, explica Castillejo, pero no podrían convertirse en una primera opción. “No significa que no sean útiles”, ha matizado, “pueden ser un buen añadido y una solución en momentos de crisis como el actual”.
Ante la imposibilidad de realizar una auditoría totalmente presencial, el modelo híbrido es la mejor opción según los ponentes. Un modelo que propone una parte presencial para la revisión de las instalaciones con más detalle, mientras que la revisión de la documentación se haría de forma remota, habiendo recogido con anterioridad toda la información necesaria.
El caso óptimo de auditoría online, explican Castillejo y Cardona, es uno en el que haya una emisión de vídeo en directo así como una conexión de audio entre el auditado y el auditor para que este último pueda hacer las preguntas necesarias o pedir más información sobre algo que pueda ver en el vídeo.
Por otra parte, advierten los expertos de IQS Executive Education, en las auditorías online hay más riesgo de que el auditado pueda esconder o manipular la información, y se pierde el contacto personal y las reacciones espontáneas que hacen que estos procesos sean realmente efectivos.